Nuestra historia
Si una virtud posee el Festival Guácaras es haber abierto una ventana al Cine Regional.
Aquel año 2011 en el que se conformó el Grupo Guácaras con la dirección de Marcel Czombos, había más incertidumbre que certezas. Unidos por algunas convicciones y muchas ganas, se decidió que era necesaria una pantalla que recibiera la gran producción de cine amateur y semi-profesional que ocurría subterráneamente en toda la región. Un cine no para profesionales del cine, sino un cine que priorizara al espectador como principal protagonista. A esa visión se sumaron otras que luego serían la marca distintiva del Guácaras: cine a cielo abierto.
La década no hizo más que crecer en participantes, en películas y en público. Año a año sus organizadores se veían obligados a subir la vara, para satisfacer una demanda creciente. En los últimos años el número simbólico que desafió el espíritu de los organizadores fue llegar a los 5.000 BOC. En el año 2019 el “Guácaras, Festival Internacional de Cine” logró convocar a cinco mil ciento nueve (5.109) espectadores, la mayor cantidad de público de su historia, superando a la última edición en 658 BOC. A la sazón por el festival han pasado 346 realizadores con más de 200 horas de material proyectado.
La pandemia en curso obligó a desplegar toda la creatividad del grupo. Con barbijo y distanciamiento obligatorio se larga este décimo Festival Guácaras 100% Regional: del 5 al 10 de diciembre fue virtual y a través de todas las redes (Youtube, IG y Face), se pasó una retrospectiva de los 10 años y la frutilla de la torta fue el auto Guácaras.
“El cine es como el amor. Si te atrapa, no hay manera de escapar.”, dice Leonardo Favio. El grupo organizador del Festival bien lo sabe y se apresta a celebrar una década de amor. Desde comienzo de siglo las nuevas generaciones de cine de la Argentina han ido incorporando tecnología digital disponible, ésto comenzó a abaratar los costos totales de una producción audiovisual, convirtiéndola en una actividad con cierta accesibilidad para amplios sectores que antes tenían vedada esa posibilidad. Pronto los realizadores audiovisuales crecieron a lo largo y ancho del país, y han transformado el “paisaje audiovisual nacional” provocando cierta apertura, la industria del lenguaje audiovisual, que siempre estuvo anclada en la ciudad capital del país, comienza a abrirse lentamente hacia las provincias.
En el contexto de la sanción y ejecución paulatina de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (Conocida como Ley de Medios), que fue sancionada en 2009, es que se dan las condiciones necesarias para la emergencia de un festival de estas características. Ésta ley obligaba a diversos organismos
nacionales a financiar y asegurar la emisión de telefilms de origen regional, NEA, NOA, etc.
En parte esta obligación de financiamiento y emisión fue producto de las presiones ejercidas por el conjunto de realizadores de las diversas regiones y provincias del país que pedían “federalizar” la producción audiovisual, para así poder disputar espacios y fuentes de financiamiento, que un 95% eran ocupados y destinados a productoras de “Palermo Hollywood” en la ciudad de Buenos
Aires. Para el 2011, a dos años de la implementación de la ley, ya se había generado un notable incremento de producciones realizadas en su integridad en las provincias, allí producían, trabajaban, actuaban y participaban habitantes de estos lugares, generalmente las más postergados del país.
Queda así al descubierto una vacancia y una demanda de los realizadores.
Si bien existía festivales de cine en la región, (Festival Lapacho en Resistencia, Chaco y Oberá en cortos en Misiones) no había uno que en su programación incluya exclusivamente a producciones regionales, tampoco en donde se puedan mostrar los formatos y duraciones con los cuales habían sido realizados muchas de las diversas producciones, unitarios, telefilms y series de 4, 8 o 13 capítulos; o los formatos no estandarizados en los que muchos realizadores producen y luego no tienen posibilidad de exposición. Tampoco la provincia de Corrientes contaba con festival de cine alguno.
Es así que, ante la necesidad sentida por un gran conjunto de realizadores de mostrar sus producciones, y la particularidad que ofrecía este pueblo, que por sus características socioculturales y arquitectónicas, fue elegido por varias producciones como “locación”, terminó siendo el lugar para generar una instancia de mostrar lo producido y cubrir dos demandas puntuales: de los productores ya mencionada, y de cierta cantidad de actores y “extras” que “actuaron” en esas producciones y “querían verse” en la pantalla.
Nace así el “Guácaras: Festival de Cine 100% Regional” en diciembre de 2011, que a partir de su nombre implicó una decisión fundamental y determinante en su identidad y posterior desarrollo. El territorio incluido se definió por los creadores del Festival tomando a Santa Ana como epicentro, con un radio de 500 km a la redonda, dejando expresamente por fuera del mismo a lugares como Buenos Aires, Rosario, Córdoba etc, que por sus características socioeconómicas, son los lugares donde se concentran las producciones y festivales audiovisuales. Pero queda incluido en esa región el país de Paraguay, el sur de Brasil y el norte de Uruguay. Se busca así que sólo producciones incluidas en ese radio sean partícipes de este festival, consolidando así una subjetividad territorial “litoraleña” y una “Región Cinematográfica Guácaras” (NE Argentina, Sur de Brasil, Norte de Uruguay y Paraguay).
En el año 2012 se crea la agrupación “El grupo Guácaras”, que es la autodenominación que se dan así mismo el grupo de personas que organizan y producen el “Guácaras, Festival Internacional de Cine”, sus integrantes provienen de diversas disciplinas: realizadores, guionistas, directores, sonidistas, productores, cantantes, actores, estudiantes de artes y cine, más algunos habitantes de la localidad.
Después de 8 ediciones (2011 al 2018): Se han proyectado 336 títulos, entre largos y cortos, en los diversos géneros: ficción, documental, animación, videodanza, videoclip. 168 directores nacidos en la región han podido mostrar sus obras a su público. En 2015 el Festival recibió la visita del actor correntino Carlos Portaluppi para presentar la producción “Pueblo que fue”, en el 2016 también lo visitó el actor de renombre internacional Rodrigo de la Serna, que llevó su banda Yotivenco y ofreció un espectáculo musical. Además de la constante participación y visita de bandas y artistas locales y de la región que diversifican la oferta cultural del festival.
Desde el año 2017, éste “Grupo “Guacaras” viene desarrollado un proceso de autoreflexión sobre el festival, donde se llevó adelante un diagnóstico general de la situación organizativa y prospectiva del Festival . Por su parte, no está demás aclarar que el vínculo de los que 3 aquí escriben con el festival es extremadamente cercano, puesto que uno de los autores de este proyecto es realizador audiovisual, uno de los fundadores y actual director del festival, además habitante de la localidad desde hace 10 años.
Los "guacaradores"
El Grupo Guácaras considera al espectador como un eslabón imprescindible, agente esencial y el más importante a la hora de entender el oficio del cine, ya que el círculo que se abre cuando un autor escribe un guión, se cierra al final con el espectador mirando.
El Festival reconoce la importancia de aquellas personas que, por resultado de un proceso histórico de interacción, se han relacionado de un modo muy cercano con ellos. Estos no tienen necesariamente una vinculación con el quehacer del cine, sino que son participantes a partir de la asistencia a las diferentes actividades, adquiriendo un rol activo durante todo el evento. A este rol activo participante, los autores de este proyecto lo denominamos “guacarador”, combinación de la palabra “Guácaras” con espectador, bautizando a este especial público desde una concepción más activa. Uno de los hechos más destacados y diferentes a otros festivales es que éste público, no sólo se “sienta” a mirar las películas, sino que automáticamente se convierte en un jurado, que puede emitir su voto al finalizar el segmento de la competencia.
El “Guácaras, Festival Internacional de Cine” tiene como objetivo principal “generar un espacio de promoción, valoración y difusión del cine realizado en el Nordeste Argentino, con el eje puesto en el Guacarador como culminación del ciclo de producción” . La realización de cada Festival garantiza la exhibición de películas regionales y trabaja en la formación de audiencias favoreciendo el crecimiento de la industria audiovisual de la regional y nacional.
A sólo un año de su nacimiento, el Festival formalizó su presentación en el INCAA y se convirtió en “Sala Cinematográfica” , lo que permitió entregar el Boleto Oficial Cinematográfico (BOC) y poder recibir así los subsidios a festivales que otorgaba dicha institución. Una de las metas más importantes de la organización del festival es superar edición tras edición, la convocatoria de público asistente. Concretamente incrementar la asistencia del público al festival y superar los BOC cortados en las cuatro noches de la edición previa; hay un número simbólico que “danza” como desafío en el espíritu de los organizadores: llegar a los 5000 BOC en la edición 2019.
Desde hace 11 años Santa Ana de los Guácaras se convirtió en el escenario ideal para el “Guácaras” Festival Internacional del Cine 100% regional; evento gratuito y cinematográfico al aire libre, organizado por realizadores y productores conformados por el Grupo Guácaras.
El sello de 100% Regional es su marca, ya que durante los días del Festival se pueden apreciar material documental, ficción y animación producido en la región (Norte de Argentina, Sur de Brasil y Paraguay) donde se muestra mano y cara de obra local y con equipamiento de la región.
“El Guácaras ya es parte de la vida cultural de Santa Ana, es nuestro orgullo y es de los eventos culturales más importante que tenemos en nuestro hermoso pueblo” dice el intendente actual de Santa Ana, el profesor Augusto Navarrete.
En ese sentido Marcel Czombos, director del Festival sostuvo :“Llegamos al 11 con el orgulloso sello de 100% regional, sabemos que es una responsabilidad histórica y una entrega completa, pero el parámetro es otro, la medida es la gente, el Guácaras está enamorado, se enamoró de “La gente”; esa gente que se identifica con el material cinematográfico de acá, porque ve sus colores, sus rostros, sus circunstancia, y escucha sus chistes, su tonada, su música... en nuestro festival, se piensa a partir de la gente y nada más”.
“Este festival es, revolucionario”, dice Jorge Román el protagonista de “Matar un muerto”, luego de trazar su fulgurante trayectoria desde Felicidades, pasando por El Bonaerense, hasta la serie Monzón, las palabras de Román, ganador del premio a “Personalidad destacada 2019” en el anterior Guácaras suenan como un bálsamo para este Festival que programa 100% de cine regional en Santa Ana de los Guácaras en Corrientes.